Hoy en día tenemos a un click montañas de información. Libros, blogs, podcasts, videos y demás. No obstante, la información sola no es suficiente. Si todo lo que necesitáramos fueran algunas ideas y una actitud mental positiva, cada uno de nosotros viviríamos en la abundancia.
La acción es el catalizador y clave de todo gran éxito. Es lo que produce resultados. El conocimiento sólo es poder potencial, y hasta que llega a las manos de alguien que sepa como llevarlo a la acción efectiva, permanecerá latente pero inactivo. De hecho la definición literal de la palabra poder es la «habilidad de actuar». De nada sirve leer montañas de libros si no se pasa a la acción y no se pone en práctica nada de lo que dicen. Por muy buenos que sean.
No se puede negar que las desigualdades son un hecho en la vida. Algunas personas son juzgadas y etiquetadas de forma predeterminada por ser de sexo femenino, discapacitados, extranjeros, solteros, negros, rubios, pelirojos, gordos, feos, con poca voz, jóvenes, viejos …., o cualquier otra característica arbitraria, incluyendo las contrarias a las mencionadas.
A menudo las propias personas utilizan sus diferencias como excusa para justificar su abandono. «Como soy mujer y las mujeres nunca consiguen buenos puestos en los negocios, ¿para qué intentarlo?». O, «Soy demasiado viejo para empezar nada». La buena noticia es que, si prestamos atención, nos daremos cuenta de que el gran don que posee la gente de éxito no es una característica externa, sino la capacidad de lanzarse a la acción. Es un «don» que cualquiera de nosotros puede desarrollar. Después de todo, otras personas tenían los mismos conocimientos que Robert L. Johnson, el magnate de la televisión por cable BET. Cualquier otra persona podría haber pensado que un canal de televisión por cable exclusivamente para negros tendría un tremendo potencial social y económico, pero sólo Johnson tuvo esa visión de futuro, se lanzó a la acción, y lo convirtió en una realidad.
Aunque a Johnson le decían que ningún hombre de raza negra podría hacerlo, él no estuvo nunca dispuesto a creerlo, y demostró una ley universal fundamental: todos los éxitos realmente importantes suponen el hecho de superar obstáculos. Está en tu mano convencerte de que cualquier persona (hombre o mujer) con resolución no tiene que detenerse ante un obstáculo, ya sea racismo, discapacidad física, religión o cualquier otra cosa. De hecho, los obstáculos pueden realmente serte de utilidad para lograr un gran éxito y finalmente llegar a ser una gran y mejor persona gracias a ellos.
Imperfecto pero real, es mejor que perfecto sólo en tu mente.
Otro freno a la acción es la búsqueda de la perfección. Lo perfecto es enemigo de lo bueno. Una idea perfecta no da dinero. La clave es crear y ejecutar. Perfeccionismo e indecisión no te llevarán a ningún sitio. La idea imperfecta puede testarse vendiéndola. Poniéndola en práctica. Sacándola del armario. Si pretendes esperar a que la idea sea perfecta para lanzarla perderás tiempo y dinero, sin que nada ni nadie te garantice que cuando para ti sea perfecta se venda.
La claridad sólo viene por la acción. Las respuestas a tus dudas sólo las tendrás una vez te pongas en marcha, y si luego compruebas que te has equivocado, es O.k. Tienes permiso para equivocarte. Puedes dar marcha atrás o corregir el rumbo. El tiempo y la vida es limitado. No lo pierdas más. Intención sin acción no sirve de nada.
«Es mejor un gramo de acción que un kilo de intención». Gustavo Piera. El arte de gestionar el tiempo.
Fuente del Post: Desata tu poder ilimitado Anthony Robbins y Joseph McClendon III.
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